Fecha: del 16 al 22 de diciembre de 2017.
Un par de curiosidades:
– La República de Chipre tiene 9.250 Km² de superficie y casi 650 Km de costa, siendo la tercera isla más grande del Mediterráneo con una población de algo menos de 1.2 millones de habitantes. Encajada entre Turquía, Siria, Israel, Líbano, Egipto, Palestina y Grecia, lleva habitada desde hace milenios y ha sido colonizada por numerosas culturas a lo largo de la Historia. Tiene 3 lugares designados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO: 1) Pafos, 2) Las iglesias pintadas de la región de Troodos y 3) El yacimiento neolítico de Choirokoitia.
– Aunque en teoría la República de Chipre tiene jurisdicción sobre todo el territorio de la isla, en la práctica se encuentra partida en dos, con la parte norte-noreste bajo control de la autoproclamada República Turca del Norte de Chipre, que depende directamente de Turquía, único país que la reconoce. La partición de produjo tras la guerra de 1974, que además dejó una zona desmilitarizada llamada Línea Verde que ocupa un 4% del territorio de la isla.

Chipre en diciembre: como en la mayoría de los destinos en el Mediterráneo, los mejores meses para ir a Chipre son mayo, junio y de mediados de septiembre a mediados de octubre porque el tiempo es perfecto, hay mucha menos gente que durante el verano y te puedes bañar sin problemas. Sin embargo, tras la experiencia de ir en diciembre me parece una opción interesante y recomendable, dado que Chipre tiene un clima aún más cálido que el sur de España o Italia. Algunas razones para ir en diciembre: la temperatura fue estupenda (sol y 20 grados o más durante el día, noches frescas pero no frías), prácticamente nada de turismo incluso en los lugares más visitados, precios bajos tanto en el alojamiento como el alquiler de coche y escaso tráfico en las carreteras. La parte menos buena es que hay que ser un poco valiente para bañarse en el mar (aunque yo lo hice) y que en algunos sitios hay restaurantes cerrados. La semana que yo estuve, justo antes de Navidad, debe ser de las menos concurridas del año y me pareció un momento estupendo para ir.
Vuelo: Londres Gatwick (LGW) – Pafos (PFO) – Londres Gatwick (LGW) con Easyjet. El precio fue de £109 incluyendo una maleta facturada, comprado con tres meses de antelación en la web de Easyjet. El avión fue un Airbus 320 que iba bastante lleno en ambos trayectos, con un tiempo de vuelo de unas 4 horas a la ida y veinte minutos más a la vuelta. Ambos vuelos llegaron en hora y transcurrieron sin incidentes.
Documentación y moneda: la República de Chipre forma parte de la Unión Europea, por lo que los ciudadanos de la misma solo necesitan pasaporte o documento nacional de identidad en vigor. Para ciudadanos de otros países, aquí hay una lista con los que necesitan visado. La moneda oficial de Chipre es el euro. Cuando se cruza a la parte turca hay que pasar frontera y es necesario mostrar el pasaporte, aunque no lo sellan (al menos a mí no me lo sellaron las varias veces que crucé). Para visitantes que no tengan pasaporte de la Unión Europea, aquí está la lista de países que necesitan visado para pasar a la parte turca. En la parte turca se usa la lira turca. Aceptan euros en prácticamente todos los sitios (billetes, no siempre monedas), pero el cambio (calculado de aquella manera) te lo devuelven en liras turcas. Si vas a estar unos días en la parte turca merece la pena cambiar algunos euros a liras por comodidad y algo de ahorro.
Itinerario:
Zona griega: Larnaca, Choirikotia, Curio (Kourion), Nicosia, Pafos, península de Akamas, Troodos, Monte Olimpo.
Zona turca: Salamis, castillo de Kantara, península de Karpas, Kirenia, castillo de San Hilarión, Nicosia.
Día 1 – 16/12: Llegada al aeropuerto de Pafos y alquiler de coche. Ruta en coche de Pafos a Larnaca. Noche en Larnaca
Día 2 – 17/12: Paseo por Larnaca. Visitas a Choirikotia y Curio (Kourion). Noche en Larnaca
Día 3 – 18/12: Parte turca: Salamis, castillo de Kantara y península de Karpas. Noche en Larnaca.
Día 4 – 19/12: Parte turca: Kirenia, castillo de San Hilarión, Nicosia. Parte griega: ruta en coche de Nicosia a Pafos. Noche en Pafos.
Día 5 – 20/12: Visitas en Pafos: sitio arqueológico de Pafos y Tumbas de los Reyes. Reserva natural de Akamas. Noche en Pafos.
Día 6 – 21/12: Iglesias y monasterios de la región de Troodos y Monte Olimpo. Noche en Pafos.
Día 7 – 22/12: Paseo marítimo de Pafos y vuelo de regreso desde Pafos.
Alquiler de coche y conducir en Chipre: alquilamos el coche a través de Economycarrentals, aunque el proveedor local fue Enterprise. En el aeropuerto nos estaba esperando una furgoneta y nos llevaron directamente a la oficina, que estaba a las afueras del aeropuerto. Todo el papeleo fue rápido y sin problemas. Nos dieron un Chevrolet Spark de gasolina, limpio y en buenas condiciones que no dio ningún problema. El precio total por la semana de alquiler fue de apenas 33€, con la máxima cobertura posible en el seguro.

El contrato de alquiler permitía pasar el coche a la parte turca, pero el seguro dejaba de ser válido. En la frontera tienes que presentar los papeles del coche y luego sacarte un seguro a terceros en una caseta que está justo al pasar el control de pasaportes. La duración mínima es de 3 días y el precio 20 euros. Te lo hacen sobre la marcha y es rápido. Dado que hay zonas de poca cobertura y en las que el GPS funciona regular, es recomendable llevar un mapa de carreteras si se cruza a la parte turca.
En la parte griega las carreteras están muy bien por lo general, con las principales ciudades (Larnaca, Pafos, Nicosia, Limasol) unidas por autopistas gratuitas. Las carreteras secundarias están bien asfaltadas y señalizadas. En la parte turca las carreteras son peores, pero las principales estan razonablemente bien. Las secundarias son estrechas y con baches ocasionales, pero tampoco son un problema. En general, conducir en Chipre fue sencillo, ayudado por el poco tráfico en la época en la que estuve.
Nota importante: ¡cuidado con el roaming! Al pasar la frontera es, a todos los efectos, como estar en Turquía. Eso incluye los operadores de telefonía, que, al ser turcos y no pertenecer a la Unión Europea, cobran por llamar y usar datos en roaming, lo que puede hacer que llegue una factura considerable e inesperada. Para evitarlo llega con apagar los datos en roaming y conectarlos solo en los casos en que hagan falta o usar wifi cuando esté disponible.
Un consejo: si solo se va a ver la parte griega, distribuir las noches entre Larnaca y Pafos es buena idea. Pero si se quiere ver la parte turca compensa hacer al menos una noche alli para evitar tener que hacer kilometraje innecesario como fue mi caso. Si tuviese que repetir el viaje haria dos noches en Larnaca, tres en Pafos y dos en la parte turca.
Mi Top 5:
- Pafos y sus lugares arqueológicos
- La región de Troodos
- Curio (Kourion)
- La península de Karpas
- Salamis
Y aquí sobre mi segundo libro: El Gigante Rojo. Historia del baloncesto soviético