Japón: Curiosidades Aleatorias (I)

TOTO, tu mejor amigo

Una de las leyendas urbanas sobre Japón más conocidas pero no por ello menos fascinante es la de los váteres de alta tecnología. La inmensa mayoría son de la marca TOTO (aunque hay otras como INAX) y su serie de modelos washlet (ウォシュレット, Woshuretto) se ha convertido en el sinónimo de tan prodigioso artefacto, como el walkman de Sony o el pan Bimbo en sus respectivos productos. Llegaron al mercado en 1980 y ahora hay uno en prácticamente todos los hogares japoneses. Puedo asegurar por experiencia propia que enfrentarte a uno de ellos por primera vez es un reto considerable del que saldrás limpio como pocas veces.

Un mando lleno de botoncitos en japonés y con algún que otro dibujo más o menos intuitivo sirven para que la madre de todos los inodoros haga de todo: el asiento tiene calefacción regulable incorporada, el chorrito limpiador permite ajustar hasta dónde quieres que llegue y también la presión del agua según dónde te vaya a dar, una vez limpio sale un secador, la tapa se abre sola con un sensor de proximidad, el asiento sube o baja con el mismo sistema, tira de la cadena solo, esparce desodorante automaticamente…aunque no todos los modelos hacen todo esto. Para evitar chorros de agua en la cara de algún curiosillo despistado, desde hace años la manguerita de las funciones bidet sólo se activa si hay alguien sentado. Para rematar la faena dicha manguerita se lava automaticamente antes y después de cada operación a pesar de que nunca toca la piel o el zurullo si se usa correctamente. Muchos váteres (como el de la foto) traen un pequeño lavabo incorporado encima de la cisterna para que te laves las manos con el agua que va llenando el depósito y así ahorrar agua.

Hablando de ahorrar agua, como hay japoneses bastante pudorosos (especialmente ellas) y les da verguenza que les oigan orinar o hacer fuerza, suelen tirar de la cadena constantemente para que el ruido de la cisterna ahogue los comprometedores sonidos. Ello, obviamente, conlleva un enorme despilfarro de agua. Para evitarlo pusieron en los TOTOs un botón que produce un agradable hilo musical a la vez que protege tu intimidad. Parece ser que la solución no convenció a los usuarios/as, así que se añadió un muy exitoso botón que imita el sonido del agua al tirar de la cadena pero sin que salga agua, claro. Una amiga bloguera encontró el TOTO tan irresistible que compró uno en Japón, lo mandó por barco a España y a los pocos meses ya lo tenía instalado y disfrutaba de él.

Vagones del metro sólo para ellas

Pues a pesar de la imagen que tenemos (con razón en mi opinión) de los japoneses como gente extremadamente cívica, educada y cortés, se ve que nadie está libre de pecado. La masificación del metro de Tokyo en hora punta es tal que los empleados empujan a la gente para que se apretujen más y quepan más viajeros en el vagón. La extrema proximidad física parece que despierta el lado más salidillo y oportunista de algunos de los viajeros masculinos que se dedican a agarrar y palpar todo lo que pueden.

Ello ha hecho que en algunas de las líneas de metro haya vagones sólo para mujeres. Suelen ser los dos últimos y hay unas pegatinas de color rosa en el andén que lo indican (ver foto). La prohibición a los hombres de usar éstos vagones dura de 7:30am a 9:00 am. Dentro del vagón también hay pegatinas en inglés y japonés.

Y para terminar, he visto en Tokyo una moto que es la caña:

Japon, curiosidades aleatorias (II)

Japon, curiosidades aleatorias (III)

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